Cerro de las Yeguas y Rubio Chico - Jul/2023 (Senderismo)

Bitácora:

Julio 2023.

Segundo día
Es el de mayor recorrido y dificultad; Cerro de las Yeguas, decían 12 km pero metimos alguno más.

Luego del desayuno y pertrecharnos con el almuerzo unas milangas al pan y rapadura de postre un par de botellas de agua y empezamos la aventura. Nada más pasar la portera nos sale burro a saludarnos rebuznando como loco, parece que quiere venir con nosotros, avanzamos hasta el comienzo del valle donde teníamos una vista privilegiada. Luego un descenso, sorpresa con cuerdas instalada por los baqueanos del grupo hasta una pequeña cascada entre las piedras que ya nos sorprende con el tamaño de estas y la vegetación exuberante.

Luego atravesar varias cañadas todas con abundante agua lo que las hacía más lindas; caminamos un buen trecho donde tuvimos clases magistrales de parte de César y Mario sobre la flora y fauna del lugar, alucinante. Luego de mucho andar llegamos al fondo del valle y entramos a la cañada de las yeguas con su lecho de piedra increíble y donde estaban las nacientes del arroyo.

Con el cerro a la vista emprendemos el ascenso que parecía ahí nomás pero rápidamente nos dimos cuenta que no era así con garra charrúa llegamos a una de las cimas con una piedra espectacular para sacarse fotos para los más valientes que no fue mi caso realmente era increíble.

Seguimos viaje, el día está perfecto fresco y soleado ahora vamos a bajar hasta una de la ramas del arroyo del lugarejo, lugar hermoso cuando llegamos al valle Jose se da cuenta de qué había perdido el celular, por suerte César y el otro guía en tiempo récord volvieron corriendo a buscarlo y contra todo pronóstico lo encontraron increíble, reanudamos la marcha por el valle hacia el Gavilán por supuesto todo subida.

Por la mitad a comer unas naranjas, una parada técnica en un puesto abandonado y a seguir subiendo. A todo esto el sol se estaba poniendo y empezamos a apretar el paso. Al fin llegamos al Gavilán alrededor de las 5:30. Cansados pero contentos.

Ahora a preparar unos mates reencontrarse con la gente que quedó en el Gavilán y prepararse para hacer la cena con la carne que sobró de la noche anterior; se preparó alto guiso comunitario que fue ideal para una noche muy fría, compartimos fogones alguna bebida espirituosa guitarreada y cuentos hasta altas horas de la noche cuando ya el cuerpo no daba más nos fuimos en busca de un merecido descanso.

¡Rubio Chico y Cueva del Indio!

Cuarto Día
Vamos al rubio chico.

Luego de un sueño reparador, el día nos deparaba una sorpresa una de las noches más frías del año con una helada realmente espectacular, lo que había quedado afuera, sillas vehículos y el pasto todo cubierto de escarcha.

Luego del desayuno partimos en el bus hacia el rubio chico un kilómetro y medio más o menos paramos en la portera saludamos al casero es de rigor y nos internamos en el campo donde se encuentra el rubio chico.

Los charcos que encontramos en el camino todos congelados con César que nos cuenta la historia de esos parajes y sus habitantes es realmente un placer. Ese trayecto está muy bien señalizado habían hecho su trazado y señaléctica hacía poco tiempo.

Encontramos la bifurcación hacia la cueva del indio, realmente espectacular con su caída de agua, su abundante vegetación y un entorno realmente mágico. Como siempre con César y Mario esos caminos se convierten en una clase en vivo de fauna y flora lo que realmente le da un toque muy bueno.

De ahí salimos en busca del rubio seguimos bajando hasta llegar a la cañada que estaba con mucha agua realmente tuvimos mucha suerte tomamos las fotos de rigor y parte del grupo fuimos río arriba a buscar la cascada, despacito y por las piedras llegamos, realmente una grata sorpresa de los más lindos recorridos.

El retorno con todo el grupo como no podía ser de otra manera cuesta arriba pero realmente el día no podía estar mejor fresco pero muy soleado. Al bus y retorno del Gavilán, llegamos la gente que estaba en el camping a desarmar todo y los demás armar los bolsos.

César y su señora nos esperaban con otra sorpresa unas lasañas espectaculares y un buen arroz con leche de postre qué más se puede pedir. Cargamos todas las cacharpas en el ómnibus y emprendemos el retorno. Para técnica en Durazno, nos abandona Gerardo y su familia que siguen para sus pagos y continuamos hacia el acal.

Llegada y despedida con pena de que terminara ese fin de semana tan enriquecedor desde lo humano hasta el entorno maravilloso del lugar, fue una experiencia inolvidable. Gracias a todos lo que lo hicieron posible y gracias por dejarnos participar de ese maravilloso grupo humano.
Muchas gracias y hasta la próxima

Relato: Enrique Rama
Fotos: Grupo Canotaje Travesía club ACAL

Primer Relato (02 Quebrada del Gavilan y Cascadas del Indio y Grande)