Organizada por Remo Aventura y perteneciente al calendario de actividades, Filipini nos invita y allá partimos Filipi, Dora, Sandra y yo, Por su lado también asistieron Salvador y Maria del Carmen.

Como siempre una de las piernas era de Paso Severino a la ciudad de Santa Lucía terminando en el puente de la ruta 11. No fue así ya que no se consiguieron los permisos (al parecer) y salimos del campo de un tambero (señor Amaro) vecino próximo a Paso Severino.

Tan temprano llegamos que me toco el número 1 en las inscripciones las que se hacían a la orilla del río. Fuimos embarcando y esperamos al resto.

Remamos un poco y nos advirtieron de los rápidos y correderas que este río tiene. En la cascada grande nos esperaba la organización.

Con tanta agua las correderas fueron tremendas; un espectáculo y quizás con equipaje a bordo hubiésemos tumbado. Fueron casi 5 minutos de correderas una atrás de la otra en las que algunos tumbaron. Al llegar a la cascada paramos para filmar, fotografiar y divertirnos ya que los organizadores trajeron cámaras de camión. Entre Kayak y Canoas serian unas 30 embarcaciones no recuerdo bien.

La mayoría paro y otros se tiraron de una en un salto de agua peligroso ya que la mayoría tumbo o se le lleno la canoa de agua. Mientras algunos pasaban todavía salieron los gomones a los cual nos trepamos y pasamos la cascada a pura diversión. Desde las alturas Hugo (uno de los organizadores) con megáfono en mano avisaba de que era un lugar profundo y que buscaran pie más en la orilla.

Por lo general las canoas tipo Sioux fueron las que zozobraron mas ya que su proa alargada corta muy bien el agua pero también corta muy bien las olas y se llenan de agua mas fácil. Claro está que cuanto más peso peor también.

Luego nos tocó a nosotros y zas al agua pato, no tumbamos pero se llenó de agua. Continuo la travesía ahora sí sin mayores dificultades. Pasamos por 25 de Agosto, el puente ferroviario y un sin número de puntos de interés muy lindos. Como estaba crecido el caño de OSE ni lo vimos y llegamos a Santa Lucía muy temprano ya que no comprendimos que hay que ir parando y disfrutando…

Media hora después llego el grueso de las embarcaciones, el camping municipal está pegado al río así que todo estaba cerca. Merienda en los parrilleros y nos esperaba el gran fogón, luego la cena en un restaurante cercano.

Al día siguiente toco desayuno institucional y a media mañana partimos en la segunda pierna con destino, la represa de aguas Corrientes. Esta parte también muy pintoresca pero ya sin obstáculos.

Llegada mismo en la represa y visita guiada a la antigua usina de Aguas Corrientes.

Vuelta al camping y aprontarse para el almuerzo y despedida institucional con reconocimientos a los clubes asistentes y canoeros en general.

Relato: Gerardo (Aquaman ) Ruske
Fotos: Grupo Canotaje Travesía club ACAL